Cuando comienza y termina el día. Cuando aplico el pensamiento a no pensar.
Siempre que en ese escaparate permanezca una carátula recordatoria, diseñada al estilo de un tal Roy Lichtenstein.
Cuando nieva, y cuando no. O en esos momentos de libertad mental que dicen que hay. Al caminar, al no hacerlo; al desgastarte sin que lo adviertas.
Y cuando siento escalofríos viendo cuadros de Degas o me río de las curiosidades sólo descubiertas por mí.
Cuando el "qué" se produce como y cuando debe, sin "dóndes" ni "por qués".
las delicadas delicias de cada uno,
ResponderEliminarla esquicitez de la soledad no? qué lindo!
¿Puedo elegir? El qué, no, cómo, no, no lo se. Qué.
ResponderEliminarElige una. Y las otras dos te las regalo.
ResponderEliminarSiendo así, elijo no elegir.
ResponderEliminarLo que me recuerda:
"Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas. Elige lavadoras, coches, equipos de compact disc y abrelatas eléctricos. Elige buena salud, colesterol bajo y seguro dental. Elige hipoteca a interés fijo. Elige un piso piloto. Elige a tus amigos. Elige ropa deportiva y maletas a juego. Elige pagar a plazos un traje de marca en una amplia gama de putos tejidos. Elige bricolaje y preguntarte quién coño eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver teleconcursos que embotan la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de puta comida basura. Elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable, siendo una carga para los niñatos egoístas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. Elige tu futuro. Elige la vida… ¿pero por qué iba yo a querer hacer algo así? Yo elegí no elegir la vida: elegí otra cosa. ¿Y las razones? No hay razones. ¿Quién necesita razones cuando tienes heroína?"
Espero que sepas de dónde a salido este discursillo.
"de dónde HHHHHHHa salido".
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=LekkYOvjyZs
Lo que me recuerda: Bonita camiseta naranja.