lunes, 27 de septiembre de 2010

Aire nuevo.

Apenas 5 grados fuera. El frío trata de ganar la lucha, a sabiendas de que su intento será fallido. Comienzo a caminar sobre este asfalto, viejo conocido, viejo conocedor de mis huellas. Pero esta mañana todo parece distinto, y se escucha al viento intentar hablar. Lo que tiene que decir es percibido por mí automáticamente. Yo tengo predisposición, el viento tiene necesidad de comunicar. Y lo hace. Al doblar la esquina, el sol parece estar más cerca que nunca. No ciega, no abrasa, sólo acompaña. Y se me representa como una señal o una bienvenida a lo que la vida puede deparar repentinamente. Emerge la curiosidad, y la inquietud, y la esperanza.
Todo da claves del futuro que espera. Parece pacífico, será necesario y encantador empeñarse para que lo sea.


jueves, 23 de septiembre de 2010

Superlativo.

Abarco uno de tus omóplatos de modo que se fusionen nuestras ganas, mézclense nuestras respiraciones. Nunca parece tarde para descubrir un nuevo milímetro de tu piel, y los minutos se escapan como si tuviesen prisa por irse. Entonces tus labios me besan dibujándome una sonrisa en el interior, la que tú prefieras. Y lloviendo melodía y ritmo, tu proximidad me recuerda que vivo. Te entrelazas a lo largo de mis piernas acariciando mis venas y completas lo incompleto. Puede resultar extraño, y lo hace, dirigir la mirada hacia mis manos comprendiendo que ya no son únicamente mías...

lunes, 20 de septiembre de 2010

Cause I love you.



"
I wanna be your lake or your bay, and any problems that you have I wanna wash 'em away.
I wanna be your sky, so blue and high. And everytime you think of me, I wanna blow your mind. I wanna be your air, so sweet and fair. So when you feel that you can't breathe, I'll be there. Now, I wanna be your answer all the time, when you see how I put your life before mine... with no question. "

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Still.

Despierto envuelta en la incertidumbre de lo real de mis sueños. Tengo recuerdos cuya veracidad es dudosa y concluyo en considerarlos oníricos, como probablemente sean. Y es que los sueños son como mi realidad. Y mi realidad es como un puro sueño. No recuerdo en qué momento comencé a sonreir interiormente de una forma permanente. A momentos se exterioriza, y me pregunto cómo se verá desde fuera. Es más que posible que se perciba con claridad lo que navega en mi interior, tan sólo con mirarme, con escucharme al hablar. Ya no son palabras, es todo melodía. Y mirar se ha convertido en una exportación de luz, mis ojos son focos. Si me sonríen, pagaré con la misma moneda, pero con el triple de capital. Siempre, ahora, aunque encuentre oscuridades en el camino, y ruidos, y miedo, hay una mano que coger y apretar con fuerza hasta que comience a amanecer, y después. Por el contrario, cuando todo es luz, puedo sentirme en la más maravillosa escena. Con la mejor compañía posible.
Y es, una de esas sonrisas, la que se produce en mi cara cuando florece una y otra vez la seguridad de que no hay posibles fisuras, de que siempre consideraré esa luz como el mayor regalo jamás recibido.

lunes, 6 de septiembre de 2010