En esta vida hay personas y PERSONAS. Hoy he tenido la inmensa fortuna de compartir un lapso de tiempo contigo. Alguien extraordinario en medio de un mundo convencional.
Ya han pasado muchos minutos desde que expresaste de manera impecable la primera de muchas obras de arte. Pues eso es lo que produces cada vez que articulas palabra. Ocurre que resuelves de manera inmediata muchos de los pensamientos que en algún momento han rondado mi cabeza.
Toda esa valentía que necesito y que probablemente no tengo... Toda, la tienes tú.
Mientras hablas, tus ojos recorren paso a paso cada momento vivido. Pareces abstraerte al tiempo que narras, y me deleitas con una novela oral cuyo final no deseo alcanzar.
Y nada por debajo de esta calidad que tú presentas mereciera denominarse "conversación".
Desprendes fuerza, valor, ganas. Desprendes ambición e ilusiones.
Y alimentas la esperanza de que el mundo aún no esté vacío de corazones o mentes brillantes. Apaciguas la angustia de los que creíamos que ya nada ni nadie podría despertar emoción en nuestro interior.
Porque en esta vida hay personas, y PERSONAS. Y hoy he tenido la inmensa fortuna de compartir un lapso de mi día contigo. Alguien espectacular, en medio de este mundo terrenal.